La aplicación para escritorio Facebook Messenger para Windows, es decir el Chat de Facebook pero como un programa aparte en un escritorio de Windows, dejará de funcionar el 3 de marzo de 2014. No están claras las razones de por qué Facebook ha decidido cerrar una aplicación tan útil, aunque poco conocida.
Me atrevo a aventurar algunas razones. Hace pocos días se anuncio la compra de Whatsapp por parte del gigante de las redes sociales propiedad de Mark Zuckerberg por una cifra estratosférica, 19 mil millones de dólares en total. Pero que relación tiene el cierre del servicio de Facebook Messenger para Windows con la compra de Whatsapp, mucho pues la compra de la empresa de mensajería para teléfonos móviles fue un acto desesperado. Así tal cual, un acto desesperado porque el crecimiento de Facebook se está frenando rápidamente y pronto los usuarios que abandonen la red social serán más que los nuevos. Es la ley natural de la vida, todo lo que sube tiene que bajar. Nadie gasta 20 mil millones de dólares si no es estrictamente necesario, y en este caso era necesario para impedir el colapso inminente de Facebook. Probablemente Facebook jamás recuperará lo invertido en Whatsapp.
Facebook Messenger para Windows no generaba ingresos y alejaba al usuario de la página web que si genera ingresos por concepto de publicidad. A eso se le suma que Facebook está mirando hacia los dispositivos móviles, en parte porque los PC de escritorio y los notebook vienen en decadencia, pero por sobretodo para intentar cambiar la tendencia que los jóvenes no se sienten atraídos por Facebook en cambio las personas de más edad se mantienen en la red social. Facebook no quiere transformarse en una red social de viejos. Es por eso que hace estas movidas desesperadas para intentar no hundirse.
Facebook quiere fijar el rumbo hacia los dispositivos móviles y hacia un publico mas joven y dinámico, pero evidentemente se cierne una enorme nube negra sobre la red social.
Nota: 20 mil millones de dólares gastados en comprar Facebook corresponden aproximadamente a un 25% de la fortuna del hombre más rico del mundo 2013, Bill Gates.
